Las jirafas son unos animales fascinantes
y singulares, y aunque tengamos una imagen de ellos tranquila y apacible, puede
que no siempre sean así.
Vamos a ver algunos datos sorprendentes sobre
ellas:
Las jirafas son los únicos animales del
mundo que son mudos, no tienen cuerdas vocales. Pero entonces, ¿cómo se
comunican? Los expertos han llegado a la conclusión que lo hacen a través de
sonidos inaudibles para el oído humano.
¿Alguna vez habéis visto a una jirafa bebiendo agua?
son realmente graciosas.
Para llegar al agua, deben abrir sus
patas delanteras situando el corazón a la misma altura que la cabeza, cerca del
suelo, para evitar posibles mareos.
Aunque esta posición las deja expuestas a sus depredadores, por ello beben muy rápidamente y
enseguida se levantan.
Si alguna vez tenéis la oportunidad de dar de comer a una jirafa, no os sorprendáis cuando saque su lengua, porque tiene ¡50 cm de largo!, medio metro de lengua negra, si no te lo esperas no sería raro que la comida acabará en el suelo.
Ellas utilizan su lengua como una mano,
como los elefantes utilizan su trompa, entre otras cosas la utilizan para coger
la comida o para limpiarse las orejas.
Como todos los animales que viven en manadas, los machos buscan probar que son los más fuertes frente a las hembras, para ello realizan violentos combates donde frotan sus cuellos como si fueran látigos.
Muchas veces estas peleas terminan cuando solo una de ellas queda en pie.
Y aunque puedan parecer animales lentos,
pueden alcanzar 60 km/h en distancias cortas y 15 km/h en distancias largas.
El mayor depredador de las jirafas son los
leones, pero estas no son presa fácil, por lo que los leones deben pensárselo
dos veces antes de atacar a una.
Por supuesto aprovechan que el animal esté herido o que sea una cría solitaria. Eso sí, como la madre esté cerca más vale que estén preparados.
Las jirafas tienen una gran fuerza en las
piernas y unas pezuñas grandes y afiladas, por lo que el depredador puede
acabar gravemente herido o muerto, a demás son de los pocos animales que se
atreven a hacerles frente.
Espero que hayáis aprendido un poco más de estos animales que tanto me fascinan. Y me despido con una frase que alguien dijo alguna vez:
"Se jirafa: con los pies en el suelo y la cabeza en las nubes."
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